Porrones moñudo en el lago Tjörnin

Ubicado en el corazón de Reikiavik, el lago Tjörnin es un encantador estanque urbano que atrae tanto a locales como a turistas con su serenidad y belleza natural. Entre las aves que habitan sus aguas, los porrones moñudos (Aythya fuligula) destacan por su elegancia y distintivos rasgos. Estos patos, con su plumaje oscuro, mechón característico en la cabeza y ojos amarillos brillantes, son un espectáculo común en el lago, especialmente durante las temporadas de migración. Verlos nadar o alimentarse en las tranquilas aguas refleja la armonía entre la vida salvaje y el entorno urbano de la capital islandesa.

El lago Tjörnin ofrece un refugio para los porrones moñudos.  Los machos adultos, con su plumaje más oscuro, contrastan con las hembras y juveniles de tonos más apagados, mostrando una rica diversidad dentro de la misma especie. Un paseo por las orillas del lago es una experiencia perfecta para observar de cerca a estos fascinantes patos y disfrutar de la paz que ofrece este rincón de Reikiavik.

Es habitual que los machos de Aythya fuligula dejen la zona de cría bastante pronto. La hembra se encarga sola de la incubación y de cuidar a los pollos. Por eso, durante el verano, en lagos como Tjörnin es frecuente ver solo grupos de hembras con crías.

Un porrón moñudo nada con plumas empapadas y brillantes, el agua adherida a su cuerpo reflejando la luz y destacando la resistencia de su plumaje frente a las condiciones húmedas. (♀ A)

La cabeza presenta plumas erizadas, probablemente debido a la humedad o viento, con coloración oscura indicativa de un macho adulto en actividad acuática. (♂ A)

El ojo es de un amarillo brillante con pupila negra, adaptado para visión submarina y captación de luz en aguas turbias, esencial para detectar presas y depredadores en hábitats lacustres.

Un juvenil ( pollo del año) abre el pico, traga un pez que acaba de capturar, con plumaje típico de esta etapa de desarrollo. Iris marrón oscuro. (♀ J)

El lago Tjörnin, con un perímetro de algo más de 2 kilómetros, es un oasis para la avifauna en pleno centro de Reikiavik. Mientras en invierno sus aguas se hielan y se convierten en una pista improvisada para patinadores, en verano se llena de vida: porrones moñudos con sus crías, gaviotas, charranes y ánades nadan en una armonía insólita entre naturaleza y ciudad.


- Todas las imágenes PacoTorres ©   Julio-2025 en Islandia.